Firenze


Ya es oficial! 1 noche en Pisa y 3 en Florencia. Va a ser un viaje relámpago, pero no dudo en ningún momento de que habrá valido la pena. Sucumbiré a su belleza, y cuando tenga que coger el avión de regreso, no podré. Tendré que hacerlo, pero dejaré con ello un pedacito de mí. Lo sé con certeza.

Abril en Barcelona

Para aquellos que todavía no conozcan mi historia, durante un año viví en Barcelona, concretamente en Cerdanyola del Vallès. En Abril de 2005 mi hermano vino a visitarme un fin de semana.









Lo pasamos bien, eh bicho? Estuvimos en Tarraco, la Tarragona romana, que le encantó (para mí era mi tercera vez...).








También paseamos por el centro de Barcelona, y pasamos una tarde en el Tibidabo. Verdad que se nota que lo pasamos genial? Leo, eres el mejor. Te quiero mucho.















912.5


Éstos son los días que hace que estamos juntos. Se dice rápido, verdad? Hay muchas cosas que se dicen tan rápido que no se valoran. Son palabras que ya parecen insignificantes. Gracias. Perdón. Te quiero. Con ésto puedo resumir muchas cosas que querría decirte, pero que no sé cómo. No sé escribir sentimientos. Me gustaría explicarte todo aquello que alguna vez me has hecho sentir y no te lo dije. Tantas cosas han pasado desde entonces, que una ya no puede recordarlo todo.


Recuerdo cosas que pueden parecer tonterías. Sonrisas tímidas desde lejos en la oscuridad. Noches enteras hablando. Una maleta en el aeropuerto de Barcelona. Una rosa y Sant Jordi. Varios San Juan. Una cama vacía. Conversaciones eléctricas y electrónicas. Fotos. Muchos besos. Echarte de menos. Un balcón en el Puerto de Andratx. Una canción de U2. Una cafetería a pie de playa. Muchos paseos. Un cristal en una escalera. Ahí empezó todo, te acuerdas?

















T'estim nin

Florencia, Barcelona y Stendhal

Hace días q en mi cabeza prioriza un pensamiento que casi se está convirtiendo en una obsesión: planeo un viaje a Florencia. Como amante del arte que soy, recorro webs y cuanta guía de viaje caiga en mi poder, ávida de saber tódo lo que quiero ver, e intentando planificar recorridos imposibles en los que seguramente me traicionará el tiempo y mi desconocimiento. Seguramente volveré locamente enamorada y con ganas de más, habiéndome sabido a poco éste gustoso viaje. Tengo impaciencia, nervios, emoción, me imagino a mí misma cruzando el umbral de la Santa Croce y sintiéndome mareada al igual que Stendhal, a quien se debe el conocido síndrome que se sufre cuando algo le abruma a uno demasiado. Pero yo creo que voy a padecer ésta "dolencia" en cada uno de los lugares que visite, pues tan sólo con ver imágenes del Duomo, del David de Miguel Ángel, La Primavera, El Nacimiento de Venus... me estremezco y se me pone la piel de gallina... Y ésto estando a kilómetros de distancia de mi destino...
Recuerdo mi primer encuentro con La Sagrada Familia en Barcelona. Fue a la salida del metro. Me dí la vuelta justo al salir y ahí estaba, imponente, recortándose sobre el cielo oscuro de la noche catalana... Espero que me vuelva a pasar... No puedo esperar... Muero de impaciencia!

Las palabras se van con el viento...

Como decía el encabezamiento del escudo de una ciudad donde durante un tiempo viví, "Facta non verba", que viene a decir hechos y no palabras. Cuánta razón, y cuánto me identifico con el sabio dicho... Yo siempre he pensado que los hechos son los que cuentan, y las palabras se van con el viento. Por eso decido empezar mi cuaderno de bitácora por así decirlo, para que en algún lugar del planeta mis palabras sean guardadas y no se las pueda llevar el viento...